La competencia en una economía de mercado es algo totalmente inevitable y, a la vez, sano, pues permite a los negocios el crecimiento y los impulsa a mejorar los esfuerzos de innovación y mejora de la calidad de productos y servicios, entre otros. Pero, ¿qué es la competencia? Uno de los conceptos la define como una «situación de empresas que rivalizan en un mercado ofreciendo o demandando un mismo producto o servicio». De acuerdo con la experta en marketing digital Dámaris Quisquinay, «solo de esta manera podrás conocer a qué tipo de producto está habituado tu futuro comprador, qué tanto debe caminar para llegar a la panadería, si compra por necesidad o por preferencia, entre otros aspectos». Según la profesional, la investigación de tu competencia o investigación de mercado es un proceso que no se puede omitir previo a emprender tu negocio.

¿Y SI YA COMENCÉ?

Si ya eres dueño de una panadería aún estás a tiempo de investigar. El primer paso para conocer a tu competencia es saber cuál es tu situación, solo así sabes cuál es tu campo de acción y contra quiénes competirás. Un ejemplo para aclarar: Es erróneo pensar que tu competencia se trate de una panadería industrializada, con personal y años de trayectoria, cuando tu negocio está en procesos artesanales, bajo pedido y trabajando solo los fines de semana.

Según los manuales de evaluación y emprendimiento del Instituto Técnico de Capacitación y Productividad de Guatemala (Intecap) debes evaluar los siguientes aspectos: portafolio de productos, calidad, precios, personal, instalación, comunicación, preparación de tus colaboradores y servicio al cliente. Con estos datos te podrás ubicar en el mapa de mercado.

Ya que sabes algunos detalles fundamentales, Interactive Adverstising Bureau (IAB), recomienda fijarse «metas reales y posibles de sobrepasar y poco a poco ir cambiando de competidores hasta llegar a los más altos». Un aspecto importante es reconocer que la verdadera competencia está de tu puerta para dentro, ofreciendo precios competitivos, calidad y buenas prácticas de inocuidad, excelente servicio y mejores y más promociones. Además, es necesario tener siempre los ojos abiertos, pues los competidores cercanos pueden reaccionar innovando con servicios, productos, promociones o estrategias de precios que los pongan nuevamente en la jugada. En el mundo de los negocios y el emprendimiento lo peor es quedarse quieto, así que la simple observación de tu competencia y tus ganas de ser mejor te llevarán a ser exitoso.

Las preguntas que debes hacerte

La experta en mercadeo digital Dámaris Quisquinay propone un cuestionario básico que
debes responder para analizar a la competencia.

¿Quién es mi competencia?

Y esta pregunta incluye cuántos competidores vas a tener. Esto es fácil. Debes salir, caminar, ver cuántas panaderías existen en tu localidad para localizar a tus competidores directos. Esto te dará un mapa de tu situación.

¿Cuál es el tamaño de la competencia y su fortaleza financiera?

Ver el tamaño de los locales, el número de personal, la cantidad de distribuidores que tienen te dará otro aspecto importante para mejorar tu nivel de competencia. No importa que seas más pequeño que ellos, pero debes tener claro su situación y la propia.

¿Cuál es su volumen de ventas?

Observar y observar es la clave. Si haces un cálculo de cuánto venden, podrás definir agentes diferenciadores. Muchas veces simplemente venden más por la ubicación de los competidores, por la variedad de sus productos, por sus precios o porque tiene una estrategia de ofertas. 

¿Cuál es la calidad del producto o servicio que ofrecen?

Esto es vital. Acá puedes tener una gran ventaja sin importar el tamaño de tu negocio. Si logras tener un producto diferenciador, mejorar el servicio de tu competencia o la calidad de tus productos en el momento apropiado, seguro incrementarás tus ventas.

¿Cuáles son sus estrategias de mercadeo y ventas?

Si el boca a boca funciona, imagina pequeños volantes y muestras de tu producto para las personas que transitan la calle. Busca a alguien que pueda asesorarte, pero no pierdas nunca iniciativa, esto puede ser clave para tu emprendimiento.